Dios hizo al ser humano a su imagen, y una de las características más nobles de esa semejanza es su capacidad para pensar. La pregunta es: ¿Qué lugar ocupa la mente en la vida del cristiano? El autor explica que fuimos creados para pensar y para seguir los pensamientos de Dios y nos alienta a emplear nuestra mente en todos los aspectos de la vida. Este libro nos desafía y nos invita a profundizar y a renovar nuestra manera cristiana de pensar.
3 ratings
Luis Alberto Benites Vilchez
4/2/2017
Lenin Velarde Bromley
4/7/2016
Roberto J Castillo M.
2/2/2016